Furuli, Rolf J., Cronología Asiría, Babilónica, y Egipcia.  Volumen II de la Cronología Asiría, Babilónica, Egipcia, y Persa Comparada con la Cronología de la Biblia.  Publicadores Oslo, Awatu, 2ª ed., 2008. de 376 Págs. con numerosas fotografías y gráficas. – Revisada por El Profesor Hermann Hunger, de Viena, Austria.

 

Traducido Por David García Claussell 

 

Comentario editorial: 

 

En su trabajo [en inglés] sobre la cronología del Antiguo Cercano Oriente el Dr. Rolf Furuli en Oslo, Noruega, le dedica mucho espacio a la antigua astronomía. Su discusión sobre las antiguas tablillas cuneiformes astronómicas babilónicas cubre más de 140 páginas.  De éstas, 93 páginas —casi una cuarta parte del libro— contienen un detallado análisis astronómico y lingüístico de una tablilla en particular: la VAT 4956, es un “diario” astronómico fechado al año 37 del rey neobabilónico Nabucodonosor II.  Por consiguiente, es muy apropiado que el trabajo de Rolf Furuli [la versión en inglés] sea revisado aquí por el Profesor Hermann Hunger, quien no sólo es una autoridad conocida mundialmente tocante a los textos cuneiforme y los idiomas de la antigua Babilonia y Asiría, sino que también es el experto principal en las tablillas cuneiformes de observaciones astronómicas.  Él durante décadas ha estado estudiando y traduciendo estos textos. Se han publicado sus transcripciones y traducciones hasta ahora en cinco extensos volúmenes.  

    La mayoría de las referencias en la revisión del Profesor Hunger de las obras y artículos se prestan de forma abreviada.  Los títulos completos se facilitan en una lista de referencia al final de la revisión.  

    Después de un prólogo y una introducción en “Assumptions and Perspectives”, [“Asunciones y Perspectivas”], el libro [en inglés] tiene tres partes, uno para cada una, la cronología neobabilónica, la neoasiria, y egipcia.  Hay una de conclusión “Open-mindedness and the study of ancient chronology” [“La Imparcialidad y el estudio de la antigua cronología”], seis apéndices, y una bibliografía. 

 

“Asunción y Perspectivas”   (Págs. 17-26)

 

La introducción comienza con un famoso error de medicina sobre la espinaca, cual no fue detectado durante mucho tiempo ya que las personas no verificaron las fuentes.  Entonces anota que las “presuposiciones tienden a matizar las interpretaciones”, y que las presuposiciones deben declararse con claridad.

    Estoy completamente del lado de Rolf Furuli que la “verdad” no se decide por “el consenso de una mayoría de eruditos”. Si la verdad no puede encontrarse, un consenso puede ser de poca ayuda.

    La mayoría de la introducción intenta demostrar que la cronología es incierta ya que las asunciones e interpretaciones no son seguras.  Hay una ilustración de Rolf Furuli que menciona unas tablillas cuneiformes fechadas a Nabucodonosor y Amel-Marduk que parecen mostrar que las tablillas se fecharon a un rey después de su muerte.  Rolf Furuli afirma que la “cronología tradicional” está basada en Tolomeo, pero ésta por lo menos es una abreviación: parte de la base de la “cronología tradicional” se trata del tal llamado “Canon de Tolomeo”, que fue incluido en algunos manuscritos de sus “tablillas Accesibles”. Sin embargo, esta lista debe ser más antigua que la de Tolomeo porque hubo la necesidad de una lista semejante por los astrónomos mucho antes que ésta.

    En la Pág. 26 Rolf Furuli declara como el “acercamiento a este libro” que “La Biblia, las tablillas cuneiformes, y diferentes tipos de datos históricos están ubicados en el mismo nivel”.  Éste pasa por alto las diferencias entre estos datos: la literatura no puede tratarse de la misma manera como se tratan los registros diarios; las inscripciones reales pueden enfatizar los logros del rey y olvidarse de sus fracasos; los textos que están más apartados de los eventos que ellos describen, pueden ser menos fiables que aquellos que se compusieron cerca del tiempo del evento, etc.  Una evaluación crítica de las fuentes es inevitable para poder escribir la historia.

 

“PARTE UNO:  EL IMPERIO NEOBABILÓNICO” (Págs. 27-133) 

La sección del Imperio Neobabilónico comienza con el título del Capítulo 1: “Las cronologías neobabilónica y Bíblica se contradice entre si” (Págs. 28-43).  

    Rolf Furuli primero anota algunas de las fuentes para la cronología tradicional, atribuyéndolas a Tolomeo, y entonces reclama: “la Biblia dice explícitamente que Jerusalén sería un lugar desolado durante 70 años completos” (Pág. 30). Al asumir que Babilonia fue conquistada por Ciro en el 539 y que los judíos retornaron en el 537, entonces: “llegamos al año 607 como el tiempo para la destrucción de Jerusalén”.  Éste vienen siendo el punto básico de la “cronología de Oslo” por Rolf Furuli.  

    Las declaraciones sobre los 70 años completos de la desolación no necesariamente es apoyadas por los textos bíblicos, como puede verse en el libro de C. O. Jonsson, The Gentile Times Reconsidered [“Los Tiempos de los Gentiles Reconsiderados”] (4ª ed., 2004), Págs. 191-235.   Rolf Furuli presenta su punto de vista en la Pág. 32ff.

 

Capítulo 2 (Págs. 44-55) se dedica a lanzar dudas sobre los textos cuneiformes referente a la historia neobabilónica, las crónicas e inscripciones reales.

 

Capítulo 3 (Págs. 56-66) se trata de tablillas de asuntos de negocio.  Rolf Furuli comienza con ejemplos de los errores de los eruditos cuando leyeron las tablillas (en la Pág. 56, la nota 60: una restauración es la suposición de un erudito moderno que puede estar equivocada, como en el caso citado; Por otro lado, el punto en la escritura de una figura hasta donde puede variar no depende de los lectores modernos).  Rolf Furuli entonces usa la secuencia dudosa de gobernantes para finales del imperio asirio para pretender que las tablillas no encajan con la cronología tradicional.  La nota 66 en la Pág. 58, su intención es preparar el camino para una identificación de Kandalanu y Nabopolasar.  Rolf Furuli hace referencia a la Crónica de Akitu, cual declara que “arki mKan-da-la-nu (‘después de Kandalanu’), en el año de asenso de Nabopolasar”, reclamando que arki mKan-da-la-nu también puede traducirse como “después de esto Kandalanu” o “este otro Kandalanu”.  Sin embargo, arki Kandalanu DE NINGÚN MODO puede significar “este otro Kandalanu”.  

    El cambio de reinado de Nabucodonosor a Amel-Marduk y Neriglisar está documentado en la NBC 4897; Pero como esta contradice la cronología de Rolf Furuli, él dice que “no puede usarse” (vea debajo el Apéndice A).  

 

Capítulo 4 (Págs. 67-89) rebusca unos reyes neobabilónicos no mencionados por Tolomeo (es decir, en el Canon Tolemaico).

    De inmediato, en la Pág. 67, se declara una de las intenciones de la discusión: “si nosotros tenemos que empujar los reinados hacia atrás sólo un año, la VAT 4956 no sería de valor como testigo cronológico.”  No entiendo esto: ¿por qué la VAT 4956 no sería de valor si nosotros empujamos la cronología hacia atrás?  Si bien, nosotros tendríamos una gran dificultad si es que empujamos la cronología hacia atrás, sencillamente a causa de que la VAT 4956 suministra la fecha del año 37 de Nabucodonosor.

    Siendo que hubo varios quienes pretendían el trono babilónico y Asirio después de Asurbanipal, agregándole todos sus años atestados llevaría a más años de los que se asumen en la cronología tradicional.  Pero claro, esto no es necesariamente un acercamiento correcto ya que algunos reyes pueden haber gobernado al mismo tiempo.

 

    Pág. 73: Las inscripciones de Nabû-na’id’s a veces agregan adjetivos a la palabra para reino (palû), como damqu o kinu.  Pero palû no se refiere a los años específicos de su reinado, sino a su reino en general. Por consiguiente él lo califica como “bueno” o “fiable, legítimo”.  Uno no puede esperar que un rey babilónico en su vida considerarse su reinado como uno ilegítimo.  Ninguna inferencia cronológica se puede hacer por el uso de estas palabras.

    Pág. 79: La profecía Dinástica no incluye a todos los reyes, y por consiguiente, es inservible para la cronología.  Las palabras “Durante tres años” (rotas antes de y después de) inclusive no necesariamente está refriéndose a la longitud del reinado.

    Pág. 80: Otro posible rey neobabilónico desconocido sugerido por Rolf Furuli que él percibe en las figuras del nombre de idAG-GI en una tablilla publicada por M. Jursa en 1997.  Rolf Furuli transcribe el nombre erróneamente como Nabû-šalim.  Pero un nombre Nabû-šalim querría decir “Nabû está bien”, y ésta no es una declaración apropiada (la traducción errónea de Rolf Furuli: “Permita a Nabû tener paz” es igualmente de blasfema). Si GI expresa šalāmu, exclusivamente -mušallim o -ušallim en tal caso tendría sentido.

    Pág. 82: ¿Por qué un hombre llamado Mar-šarri-uṣur tiene que ser un rey? Al contrario, éste es el nombre de un sirviente.  

    Sólo he comentado sobre unos cuantos detalles incorrectos.  Pero a lo largo de este capítulo, se le presenta al lector posibles razones para dudar de la cronología tradicional, aunque de ninguna se ofrece una conclusión.  Sin embargo la tendencia para extender la longitud del imperio neobabilónico siempre está presente. —[Para detalles adicionales del capítulo 4, vea: http://goto.glocalnet.net/kf3/sreview4.htm - eds.]

 

Capítulo 5 (Págs. 90-95) trata de los diarios astronómicos. Primero, la posibilidad de que haya errores es enfatizada.  Entonces, se describe la preservación asimétrica: sólo pocos diarios existen antes del 400 a.C., y algunos de éstos son copias.  Decir que ellos virtualmente son inexistentes no se justifica; Puesto que hay unos cuantos de ellos.  Rolf Furuli entonces le da vuelta su argumento y dice que los diarios no se hacían durante ese tiempo.  Siendo que existen tablillas que contienen observaciones planetarias de ese período, Rolf Furuli inmediatamente sospecha que representan cálculos retrospectivos. Sin embargo, las posiciones obtenidas calculando al revés de inmediato habrían estado bastante equivocadas.  Por lo menos gracias a los cálculos modernos uno podría ver que estarían equivocadas.  Sin embargo, no hay razón alguna por qué debería haber cálculo alguno hecho al revés en lo absoluto (vea debajo el Apéndice F).

     En su resumen, niega la existencia de observaciones astronómica en el imperio neobabilónico.

 

Capítulo 6 (Págs. 96-125) trata con la VAT 4956, nombrada como el “diario astronómico más importante”.  De nuevo, la mayoría de los detalles se encuentran en el Apéndice C, pero algunos tienen que ser discutidos aquí.

    Tuve el privilegio de completar una edición de esta tablilla de un manuscrito por A. J. Sachs en los Diaries, [‘Diarios], Vol. I.  Por consiguiente, ha de ser entendible que responda en detalle a las declaraciones de Rolf Furuli quien implica que hice un trabajo pésimo.  Por supuesto que debe haber algún error en la edición (dos se han encontrado, pero no son de ninguna consecuencia cronológica) que son de mi responsabilidad. Para la edición, utilicé la copia publicada de E. Weidner y una fotografía de un negativo de la colección del Museo de Vorderasiatische y que ciertamente fue hecha antes de la Segunda Guerra Mundial. No cotejé la original. ¡Como inmediatamente se verá, y tengo mucha suerte que nunca tuve esa tablilla en mis manos!

    Apresuradamente, se presume la posibilidad que la tablilla es una falsificación.  Para resolver esa posibilidad un escrutiñador sobre falsificaciones modernas fue traído.  Sin embargo, las falsificaciones modernas son hechas por moldeadores, de modo que no pueden contener la información que originalmente está presente en una tablilla genuina.  En caso que la VAT 4956 fuese tal falsificación, aún así nos daría un cuadro de una tablilla genuina.

    La tablilla se compró en Bagdad y llegó al Museo de Vorderasiatische en 1906.  Actualmente se recoció y consiste de tres pedazos que están pegados (Pág. 98).  Rolf Furuli entonces menciona “varias cosas extrañas en relación con la publicación de la tablilla” (Pág. 99). Los primeros editores, P. V. Neugebauer y E. Weidner, no mencionaron que la tablilla consistía de tres pedazos; Rolf Furuli considera que ellos debieron mencionarlo, y levanta la posibilidad que la tablilla no estaba rota en 1915.  Él también piensa que es extraño que sólo Weidner publicara la línea 18 en la parte de atrás en 1912, y atribuye esto a la competitividad de Weidner con F. X. Kugler.  En vista de la importancia de la tablilla, Weidner debió haber publicado una copia lo más pronto posible.  Pero sólo apareció una copia en el 1953.  Rolf Furuli concluye que Weidner y Neugebauer quisieron deliberadamente impedirles a los colegas examinar la tablilla original, y que “ellos tenían algo que esconder” (Pág. 101).  Pero Rolf Furuli nunca elabora en qué consistía lo que ellos pueden haber tenido que esconder.  Al presente no sé cuál es la política del Museo de Vorderasiatische, pero por lo general se les ha permitido a los colegas ver (y cotejar) una tablilla que ya se han publicado.  Hoy día, uno ya no puede preguntarle a Weidner por sus razones, no obstante, es bien probable que ellos no eran personas malévolas.  Él pudo haberse visto obligado a publicar la copia en el Vorderasiatische Schriftdenkmäler (la publicada por el Museo), y pudo haber problemas financieros en la producción durante los años veinte. 

    Los “figuras extrañas” que Rolf Furuli no puede explicar como otra cosa sino un “trastocar consciente” se discutirá debajo (en el Apéndice C).  En la Pág. 102 Rolf Furuli asume que un “falsificador escribió las figuras en el lado inverso mientras observaba la original”.  Sin embargo, ningún falsificador moderno sería capaz de copiar una escritura cuneiforme que sea idéntica en todo a la original; se requiere años de entrenamiento como escriba. Al mismo tiempo no hay manera alguna, de forma segura, poder agregarle a una tablilla seca una escritura cuneiforme exitosamente.  La tablilla estaría demasiado dura y difícil para inducir un escrito perfecto como así está preservado en la VAT 4956.

    Pág. 112: el pasaje concerniente al año 38 es una inscripción de un lema, se da al principio de la tablilla siguiendo la tablilla presente. Contrario a las imputaciones de Rolf Furuli es extremadamente improbable que un falsificador moderno o manipulador se habría tomado la molestia de agregar esto.  Para un ejemplo de tales inscripciones de lemas en otro diario, vea los Diaries [“Diarios”] I Pág. 476f. Núm. —168 línea A21’: el diario se compete a los meses V a VIII, y la inscripción del lema está al principio del mes IX.  Por supuesto la existencia de esta inscripción de un lema en la VAT 4956 no es indicación alguna de que “el escriba tenía una agenda”.  

    Las páginas siguientes más o menos presentan resultados de Rolf Furuli, de discusiones que están más detalladas en el Apéndice C, de modo que me limitaré a solo unos comentarios.

    Pág. 117: La argumentación de Rolf Furuli que el uso de las palabras “en ese tiempo” significa “alguna incertidumbre” e indica que las posiciones eran “calculadas en lugar de ser observadas” está equivocado.  inušu “en ese tiempo” introduce un resumen de posiciones planetarias; Y no hay ninguna incertidumbre involucrada. En los diarios posteriores, este resumen usualmente se coloca al final de cada sección mensual. 

    Pág. 119: Rolf Furuli argumenta que los datos en la VAT 4956 provienen de diferentes fuentes, declarando: “En las líneas 6 y 7, el nivel del río y un informe de la matanza de alguien bajo la orden del rey se indica para un intercalado de Addaru. Esto debe referirse al año anterior o a otro año y requeriría una tablilla diferente a aquellas que informan datos lunares y planetarios. No obstante este anómalo intercalado de Addaru se encuentra en la VAT 4956 entre los meses I y II.”   Sin embargo, las líneas 6 y 7 primero informan un cambio en el nivel del río que da la casualidad que amplió el anterior intercalado de Addaru al mes actual.  La matanza de alguien bajo la orden del rey no se conecta a este lapso de tiempo, sino que sucedió en el mes I; el número del día, ahora roto, debe haberse mencionado en la línea 6.  Esto no es ninguna indicación de que es el resultado de distintas fuentes.

   Adicionalmente, Rolf Furuli sostiene que el diario fue compuesto en los tiempos seléucida, porque “el ver las constelaciones como animales, ya sea solas o representando los 12 signos zodiacales, es una costumbre resiente, y no hay ninguna evidencia del zodíaco en el imperio neobabilónico o antes.”  El observar algunas constelaciones como animales no es ninguna costumbre resiente; el documento mulAPIN de principios del primer milenio a.C. está lleno de tales nombres, incluyendo sus partes. Por lo tanto estas expresiones NO pueden emplearse como un argumento para decir que la tablilla fue compuesta en los tiempos seléucida.

    Pág. 122: En apoyo a su reclamación de que pudieron haber trastocado la tablilla Rolf Furuli declara que en la primera línea, dónde la fecha y el nombre del rey fue escrito, “está en parte borrada”. Pero en mi opinión, la primera línea no está en parte borrada, sino que en parte contiene daños.

    En esta página, la sospecha de que alguien pudo haber trastocado la tablilla en los tiempos modernos, ya, en la mente de Rolf Furuli se ha convertido en “evidencia”.

    Pág. 123: Intentando agregarle 20 años al período neobabilónico Rolf Furuli sugiere que la tablilla originalmente se fechó al año “57”, pero que un erudito moderno la cambió a “37”. Él afirma que: “Una persona en la primera parte del siglo decimonoveno vio que las posiciones celestiales encajaban bien en el 568/67, y basándose en la cronología aceptada concluyó que el 57 eran un error para “37”.  Sin embargo, ninguna persona en la primera parte del siglo 19 podría haber entendido las posiciones celestiales; ya que las primeras fehacientes identificaciones de las estrellas fueron hechas por Epping en el 1881.

    Yo puedo ver lo que Rolf Furuli llama una “pequeña cuña angular” bajo las tres más grandes (y claras) cuñas angulares. Esta pequeña impresión está disparejamente orientada y es menos profunda; la considero o consideré un rasguño, no una cuña.

    En cuanto a que alguien le agregara los números 37 y 38, no hay manera alguna de exitosamente poder agregarle a una tablilla seca una escritura cuneiforme de forma perfecta.  La tablilla sería demasiado difícil para poder producir una escritura nítida como está conservada en la VAT 4956.  Hay ejemplos de tablillas que se le inscribieron después de que ellas habían empezado a secarse; esto se puede reconocer fácilmente (vea por ejemplo los Diaries III [“Diarios III”] pl. 209 Núm. —104 Rev.).

    Además, sólo los escribas especializados pueden producir una escritura que se parezca a la antigua.  Unas imitaciones modernas que Rolf Furuli menciona en la Pág. 96f. son el producto de unos moldeadores, de modo que no tienen nada que ver aquí. 

 

Capítulo 7:  Otras Tablillas Astronómicas (Págs. 126—133)

 

(LBAT 1421, 1415, 1416, 1417, 1419, 1420, 1386; las tablillas de Saturno SBTU IV Núm. 171 y la BM 76738+76813)

 

Pág. 127f.: En la LBAT 1421, no es “difícil poder explicar” por qué el número 45 puede venir antes del año 42: Ya que el 45 no es un número de un año.

 

    Rolf Furuli confunde los meses intercalados para los años 36 y 41 de Nabucodonosor: de acuerdo con Parker & Dubberstein  Pág. 5, el año 36 tenía intercalado un Addaru, y el año 41 un Ululu intercalado. ¡Además de esto, Rolf Furuli le inserta un mes intercalado que no se ha probado entre estos años para poder cambiar de sitio los eclipses lunares del año 42 para que así ellos no encajen con el 563 a.C.!   Sin embargo la propuesta de Rolf Furuli está equivocada inclusive en sus propias asunciones: El eclipse del 16 de octubre del 583 a.C. ocurrió en el mes VII, y no hubo ningún eclipse en el mes XII (el 13 de marzo de 582 a.C., la sombra de la tierra no pasó frente a la luna, vea a: Huber & De Meis, Bab. Eclipse Observations, [“Observaciones de Eclipses”], Pág. 186; Por consiguiente, ningún eclipse se lista en Kudlek & Mickler).  La LBAT 1421 no puede probar ninguna cronología, no obstante, sí está de acuerdo con la tradicional.

 

    Entretanto, Rolf Furuli ha reclamado en el foro de Internet ANE-2 que la LBAT 1421 se refiere al año 42 de Artajerjes I (para Rolf Furuli es el 433/2 a.C.), sin embargo puede demostrarse que también esto está incorrecto. (Vea: http://groups.yahoo.com/group/ANE-2/message/12432  igualmente

http://groups.yahoo.com/group/ANE-2/message/12495)

 

“PARTE DOS:  EL IMPERIO NEOASIRIO” (Capítulos 8-13, Págs. 134—237)

La segunda parte discute sobre la Cronología del Imperio Neoasirio.

    Esta sección empieza en la Pág. 134 con sincronismos entre la Biblia y las fuentes Asirías.  Aquí pauta que las cronologías no pueden traerse en acuerdo fácilmente.  Rolf Furuli emplea mucho tiempo discutiendo sobre posibles errores en las fuentes Asirías e intenta minar la fiabilidad de los reyes y las listas epónimas. 

 

En el Capítulo 11 (Págs. 183-195), Rolf Furuli intenta agregarle años al imperio neoasirio atribuyéndoles reinados más largos a algunos reyes (de fuentes dudosas) o al confundir sus reinados en Babilonia o Asiría.

 

Capítulo 12 (Págs. 196-212) se trata de los “últimos reyes de Asiría y sus homólogos babilónicos”. Primero, se discute la identidad de Kandalanu.   Rolf Furuli propone identificarlo con Nabopolasar. 

    En la Pág. 203, Rolf Furuli enfatiza en las muchas posibles lecturas de las figuras cuneiformes.  Al tiempo que esto es cierto en forma general, no se justifica confundir las figuras que son disímiles.  Puede haber ocurrencias donde nu se parezca a pap, y viceversa.  Pero en principio hay una marcada clara diferencia entre ambos, como así puede verse en la lista de símbolos de Labat. Tomar el signo de nu como pap y leerlo como un logograma para naaru requiere evidencia que la apoye; de lo contrario sigue siendo un error de lectura.

    Como próximo paso, Rolf Furuli contiende que la figura kan es similar al ag, y que por consiguiente, el principio del nombre Kandalanu puede leerse AG y se refiere al dios Nabû. Ninguna mención se hace del determinativo divino aquí requerido. Yo busqué la Pág. 33 y Núm. 143 en la Labat, y no se ve la similitud que es postulada por Rolf Furuli.

    Teniendo dos lecturas malinterpretadas hechas del nombre Kan-da-la-nu algo similar a Nabû-apla-uṣur, Rolf Furuli tiene todavía que igualar da-la con apla. Las figuras leídas como ibila NO son las mismas que tur (Labat 144); Rolf Furuli malentiende a Labat. peš y gal no son variantes de la misma figura; sólo peš-gal se atesta como un (raro) logograma para aplu.  Rolf Furuli entonces sugiere que dal-la (sic; las figuras escritas es da-la) podría ser una “referencia directa a” aplu o un sinónimo con aplu porque dallu está poco asociada con la idea.  Realmente, dallu significa “inferior”.  

    La confusión continúa con la reclamación que kan también pudiera leerse šarru (LUGAL). Sólo un LUGAL muy chapucero podría acercarse a la apariencia de kan.  Sin embargo, esto no es suficiente para Rolf Furuli: la lectura de šarru se reemplaza por bel para producir el nombre de un dios.  En las próximas líneas, Bel se convierte en Nabû sin dar explicación alguna.  Los siguientes párrafos detallan cómo hacer que Bel (=Marduk) y Nabû sean sinónimos. Todo esto se añade para confundir al lector y cada vez más hacerle creer que algo serio pudiese hallarse en estas especulaciones. Solo una simple nota filológica: Rolf Furuli sigue traduciendo los imperativos (uur “ “¡guardia!”) en forma predicativa (“permita... salve”); pero hay una forma predicativa separada en Akadio, en este caso liṣṣur.

    Para más textos que sugieren la imposibilidad de igualar a Kandalanu con Nabopolasar vea el ADRT vol. V, Núm. 52, dónde en la col. II los eventos en el tiempo de Kandalanu son seguidos posteriormente por los eventos del tiempo de Nabopolasar, claramente considerándolos dos personas separadas.

 

Capítulo 13 (Págs. 213-237) presenta nuevos esquemas cronológicos del imperio neoasirio. En el primer párrafo, leemos: “el eclipse solar en el epónimo de Bur-Sagale puede referirse a cualquiera de varios eclipses.”

    El eclipse solar en el epónimo de Bur-Sagale tendría que ser impresionante ya que un eclipse solar inesperado sólo se notará cuando es uno total o casi total; inclusive cuando se eclipsa un 95% del sol no hay ninguna disminución notable en el brillo.

    La importancia de este eclipse para fechar la lista epónima asiría es ampliamente presumida, y por consiguiente, esfuerzos se han hecho por algunas personas para minarla.  Noté recientemente tal esfuerzo en “Wikipedia”, e hice un comentario al respecto en AoF 35 (2008) 323-325. Para una traducción al español, vea: http://goto.glocalnet.net/kf4/eponymlist.pdf.

    Rolf Furuli también niega su valor.  En la Pág. 247 él dice que es una cuestión de “fe contra fe: ¿Creemos que el eclipse solar del 763 es el informado en el epónimo de Bur-Sagale, o creemos en la cronología de 2 Reyes?”   Sin embargo uno puede fechar astronómicamente la lista de los epónimos por otros medios además del eclipse solar. Como es mostrado aquí en el artículo antedicho, hay otras tablillas astronómicas del séptimo y octavo siglo a.C. que independientemente unas de otras apoyan la cronología tradicional para este período, incluyendo la fecha establecida para el eclipse solar.

    Por consiguiente podemos identificar el eclipse solar en la lista de epónimo como la del 763 a.C.  Además, la cronología tradicional Asiría del 1er milenio a.C. está correctamente preservada.  Porque ocasionalmente haya algún epónimo o nombres de reyes identificados desacertadamente en las fechas no puede restársele importancia por esto.

   Si existiese una cronología en la Biblia que contradiga la cronología tradicional Asiría eso puede dejársele a los eruditos bíblicos.  Cualquier cosa que ellos encuentren puede ser algo independiente a la cronología Asiría, pero no pueden cambiarla.

 

“PARTE TRES:  EL IMPERIO EGIPCIO” (Págs. 238-245)

 

Capítulo 14: “La Cronología Egipcia” se trata con ella muy brevemente en las Págs. 238-245. Según Rolf Furuli, no puede fecharse en lo absoluto y no ayuda a resolver los problemas encontrados en Babilonia y Asiría.

 

La Imparcialidad y el Estudio de la Cronología Antigua

 

El último capítulo (15) habla de la imparcialidad: puesto que “cualquier esquema cronológico antiguo se construye en interpretaciones subjetivas, asunciones, y paradigmas”, nosotros debemos “manifestar una actitud humilde en lugar de insistir que nuestro esquema cronológico es el único que está correcto” (Pág. 246).  Rolf Furuli entonces enumera sus puntos principales del por qué se supone que la VAT 4956 no es un testigo cronológico utilizable. 

    Al final Rolf Furuli nos recuerda que “debemos pesar todo cuidadosamente” (Pág. 250). Habiendo yo mismo hecho esto, y recordando el “ejemplo de la espinaca”, por eso yo no acepto muchos argumentos presentados en contra de la “cronología tradicional” equivocados, si bien, éstos ya están impresos en este libro.

 

APÉNDICES:

“Apéndice A:  Un Análisis del Libro Mayor NBC 4897 del Templo de Eanna”

El apéndice A (Págs. 251-262) ya se trató por C. O. Jonsson en:

http://goto.glocalnet.net/kf3/sreview4.htm

 

    Su resultado es: “Por tanto, la tablilla NBC 4897 si muestra, claramente, que Nabucodonosor reinó durante 43 años, y que su hijo y sucesor Amēl-Marduk reinó durante 2 años y fue sucedido por Neriglisar.”  Por consiguiente las sospechas y suposiciones de Rolf Furuli pueden desestimarse.

 

“Apéndice B:  Un Análisis de las Posiciones Celestiales de [el diario] BM 32312” (Págs. 263-270)   

 

Rolf Furuli usa el sistema de horizonte (altitud y acimut) para las posiciones planetarias. Esto no es práctico porque uno tiene que decidir en qué tiempo de la noche las posiciones se han de encontrar.  Si una entrada en la tablilla es “correcta o incorrecta” podría determinarse más fácilmente por la longitud y latitud. 

    Línea i, 7: no hay ningún día conectado con esta entrada referente a las últimas posiciones de Mercurio y Saturno, pero se sitúa entre el 14 y el 17. Puesto que el texto dice explícitamente: estos fenómenos no se observaron debido al mal tiempo.  Las suposiciones no fueron muy buenas; ya que para Mercurio es demasiado temprano, y para Saturno es demasiado tarde.

    Línea i, 10: “éste [Marte] estuvo cerca” no es una formulación vaga. Como puede verse por la línea iv 15’f., “éste estuvo cerca” equivale a la distancia de un dedo entre el planeta y una estrella. Pero aun cuando sea una formulación vaga, no necesariamente implica un cálculo.

    No veo por qué las palabras “befo” y “cabeza” del Escorpión hacen sugerir una figura zodiacal. Al contrario, estas sugieren la imagen de un animal.  Si se refiriese a una figura zodiacal estaría  “empezando” o al “final”, si se hubiese intencionado una indicación más precisa que una simple figura.  Por consiguiente, la inferencia (en la nota 296) que hay una inconsistencia entre las líneas 10 y 12 (qué de nuevo se usa para hacer sospechar que la tablilla fue calculada al revés) está equivocado.

    Línea iii, 4’: el “20” fue marcado como incierto por el signo de interrogación y no se puede utilizar para cálculos.

    Línea iv, 15’: “conjunción” significa que dos cuerpos celestiales tienen la misma longitud. Esto no necesariamente implica que están muy cerca uno del otro.

    “Frente” de Aries fue un intento para leer las figuras al principio de la línea.  Por supuesto, tendría que significar específicamente la estrella de Aries, de lo contrario no tendría sentido alguno una distancia. No he intentado identificar cuál estrella pudiese significar.

    En la nota al pie de la página 300, Rolf Furuli expone la idea que un “astrólogo escribió las palabras para poder causarles a sus lectores que creyesen que la tablilla contenía observaciones genuinas”; Característico de Rolf Furuli, acusar al antiguo escriba de mentiroso.

 

“Apéndice C:  Un Análisis de [el diario] VAT 4956” (Págs. 271-333)   

 

La sección C1 (Págs. 271-274): “Un análisis del dibujo publicado de la tablilla”

 

Pág. 271: Un dibujo de la VAT 4956 por E. F. Weidner se encuentra en AfO, 1953,  XVI:2, Tafel XVII.  Rolf Furuli declara que “el nombre del que hizo el dibujo no se encuentra en la revista”, pero ya lo había declarado explícitamente en la página 220 que el dibujo fue hecho por Weidner.

     Rolf Furuli primero declara que “el dibujo no es preciso” porque, mientras el cuadro del lado inverso muestra que la pausa en el espacio de la tablilla “continúa arriba hacia la cima de la tablilla”, en el dibujo se detiene antes, “tal vez subiendo a la línea 4”.  Pero en este caso es igual que “la cima de la tablilla”, ya que un pedazo está roto sobre la línea 4. De modo que no hay ninguna falla con la copia de Weidner aquí.

    “Las demás cuatro líneas” no fueron dibujadas con la ayuda de una escala recta; especialmente la línea después de la primera sección del anverso, y del mismo modo después de la primera sección del inverso, son bastante similares a la línea debajo de la línea 11, excepto por la pequeña interrupción en el medio.

    No sé si Weidner hizo su copia de una fotografía o del original.

    Pág. 274: esto aquí es una comparación entre la copia de Weidner y la fotografía de Rolf Furuli.  En algunos casos, unas pueden ser inciertas.  He anotado las siguientes correcciones para las contenciones de Rolf Furuli:

     L 15: las tres cuñas horizontales en la brecha vertical son claramente visibles, mientras que Rolf Furuli ve sólo dos. La cuña vertical es visible, algo dañada por la brecha.

     L 16: se ven las cuatro cuñas horizontales en la brecha vertical, no obstante vagamente.  Rolf Furuli ve sólo dos en su fotografía.  

     No comprendo los números 2:1, 2:3 etc.  Intenté seguir la brecha horizontal y encontrar las figuras de la descripción por Rolf Furuli.

     2:1: todas las seis cabezas son visibles en la brecha horizontal. Rolf Furuli no ve ninguna en su fotografía.

     2:3: dos cuñas horizontales son visibles.  Rolf Furuli no ve ninguna. 

     2:4: Rolf Furuli no ve ninguna cuña en su fotografía. Yo no lo puedo entender. Ya que las cuñas dibujadas están allí.

     2:7: de las “tres cabezas” en la copia, Rolf Furuli no ve ninguna en su fotografía. Si la figura “3” es la que se expresa, justo antes de que la brecha horizontal se una con la vertical, pueden verse las tres cabezas muy bien en la fotografía agrandada en la Pág. 279.

    4:3: si ésta es en la línea 19, a la izquierda de la brecha, entonces se ven 6 cuñas, 4 incluso en la fotografía de Rolf Furuli (Pág. 281).

    4:4: el dibujo muestra a dele-bad atravesando la brecha, la cual Rolf Furuli llama “engañadora”, ya que su fotografía muestra solamente unas partes de las figuras.  Pero aun cuando la brecha pasa justo a través de la figura dele-bad, esto no significa que sea engañosa puesto que dele-bad está absolutamente claro.

    5:6: sí, la cuña superior derecha del “6” le falta en la brecha.  Si Weidner hizo su copia del original, y si él la hizo poco después que la tablilla llegó al Museo, uno podría argumentar que él podría haber visto la cuña, y que se perdió después.

    6:7: esto parece ser la línea 21. Se ven cuatro cuñas horizontales en el dibujo; en la fotografía, ellas no están claras (¿por qué?), no obstante, concibo que son cuatro, vea de nuevo la ampliación en la Pág. 286.

    6:8: ésta probablemente es la figura TU (KU4 en mi edición). En la copia de Weidner, la cabeza de una cuña vertical está dibujada al lado superior de la brecha; asumo que Rolf Furuli se refiere a esto por la cuña horizontal.  De hecho en la fotografía de Rolf Furuli le falta su cabeza, se perdió a causa de la brecha. Esta vez claramente veo la cabeza perdida en mi fotografía, y también está clara en la reproducción en el plato 3 de mi edición. De modo que esta cuña definitivamente se perdió después que Weidner la hubo copiado.  

     7:1: esta está en el borde; una fotografía se encuentra en la Pág. 288. La figura es un claro BAR, una vertical y una cuña horizontal.

     7:4: la figura no está tan oscura. Puede ser kalag: la parte de abajo está parcialmente rota, pero el extremo derecho de la parte de abajo horizontal aún es visible. 

     8:4: contrario a la declaración de Rolf Furuli, partes de dos cabezas oblicuas pueden verse en la fotografía, aun en la que está borrosa en la Pág. 289.

    Tanto es así sobre la copia de Weidner. Que en las siguientes páginas, sus supuestos errores se critican de nuevo; Pero no haré comentarios en cuanto a esto.

 

La sección C2 (Págs. 274-291) plantea la pregunta:

 

“¿Los tres pedazos de la VAT 4956 son de la misma parte?”

 

Pág. 274: “Desde la línea 7 a la línea 16, las figuras... están algo erosionadas o borradas.”  Pero éste no es el caso aquí.

 

    Tabla C.1 (Págs. 275, 276) contienen “comentarios sobre las figuras en los lados de la brecha vertical”. Sobre estos comentarios las siguientes observaciones tienen que ser hechas: 

 

    (Línea) 3: la brecha pasa a través del número 19 pero la lectura es segura.  Rolf Furuli intenta introducir un elemento de incertidumbre diciendo “podríamos esperar observaciones después del día 19”.  Pero es bastante posible que no haya ninguna observación durante diez días.

    4: la figura gur está bastante clara, a pesar de la brecha que pasa a través de él.  Las palabras a la izquierda de la brecha y aquellas en la derecha forma una sucesión continua significante (informando sobre los precios) qué es muy frecuente en los diarios.  Es concluyente que ambos lados pertenecen a la misma tablilla.

    6: Contrario a la declaración de Rolf Furuli, hay sólo dos cuñas horizontales en el lado izquierdo de la brecha; lo qué él puede haber tomado para ser una cuña en la parte de abajo de la figura es sencillamente un rallazo. Además, no hay razón alguna por qué las cuñas horizontales deben continuar del lado izquierdo de la brecha al lado derecho.  Hay dos cuñas horizontales en la parte izquierda de la figura de šap, y hay dos o tres en la parte derecha, pero ésas en la parte derecha no son una continuación de las que están a la izquierda, sino que comienzan de nuevo en el medio de la figura.  Por consiguiente, la alineación de las cuñas NO puede sugerir que los dos pedazos no eran parte de la misma tablilla. 

    9: en el lado derecho de la brecha, hay una horizontal, una oblicua y una cuña vertical.  Ésta es exactamente la forma de la figura qa. La descripción de qa suministrada por Rolf Furuli (“un horizontal, y dos cuñas oblicuas”) es incorrecta. Todas las cuñas necesarias para las figuras ib-bat-qa son correctas y están bien visibles.

    10: la brecha atraviesa la figura de suhur; No entiendo por qué es que no hay ninguna conexión entre la parte derecha y la parte izquierda. Las cuñas NO son imperceptibles en la fotografía que es más antigua, y la copia de Weidner las representa correctamente.  La forma un poco abreviada de suhur usada en los diarios puede verse por ejemplo en la LBAT 176 rev. 4’ = Núm. -372 C rev. 4’ (ADRT I, Págs. 112, 113;  También vea la fotografía en el pl. 17 de la edición).

    11: Yo no veo por qué no hay ninguna conexión entre la parte izquierda y la parte derecha: el número “1” está a la izquierda de la brecha, y la medida de gur al lado derecho de mismo.

    12: la figura ga2 siempre va ligeramente más baja que la figura hun, de modo que el hecho que ellas estén en diferentes elevaciones no es de ninguna importancia.  Al hablar sobre la figura de hun, Rolf Furuli comete un error con una cuña vertical como que es una horizontal; por eso él llega a un cálculo incorrecto.  No hay ninguna vertical que falta y ninguna horizontal demás.  Ya que las figuras hun y ga2 forman una palabra específica, y SÍ hay una conexión entre la parte izquierda y la parte derecha.

    13: La brecha está atravesando la primera cuña vertical del número “2”, y por eso es que SÍ hay una clara conexión entre la parte izquierda y la parte derecha.

    14: la figura a está clara en la fotografía, no le falta la cuña superior vertical.  El cuerpo de la cuña horizontal superior de kal está cruzando la brecha; y no está más abajo en el lado derecho que el de la izquierda. Por lo menos uno de los dos verticales en el medio está claramente visible en la fotografía.  Por consiguiente, esta línea no habla en contra de si pertenecen a un pedazo la parte izquierda y la derecha.

    15: la figura ulu3 es bastante probable. Hay, como se espera, tres cuñas horizontales en la izquierda. Dos (o quizá tres) pequeñas cuñas verticales atravesando las dos más bajas horizontales, de nuevo como es esperado. La cabeza vertical al final está dañada por la brecha, pero la parte de la cabeza y su cuerpo pueden verse en la fotografía. Esto claramente es evidente relacionado a la parte izquierda y derecha sobre si son del pedazo.

    16: la figura ge6 Rolf Furuli no puede verla, pero la mayor parte de ella, tres horizontales y una cuña angular, está claramente visible en la fotografía.  Hay una obvia continuación de izquierda a derecha.

    17: no hay ninguna cuña horizontal que continúa de un lado a otro por la brecha como Rolf Furuli dice. El extremo derecho de mah está dañado debido a la brecha, y la cabeza de la cuña horizontal que pertenece a la figura “½” se perdió en la brecha. El resto de este horizontal es visible en el lado derecho de la brecha.  Por consiguiente, sería algo sin sentido conectar este horizontal a cualquier cosa en el lado izquierdo de la brecha, y la posición de estos rastros no tiene ninguna relación en cuanto a la cuestión de sí los dos pedazos son una tablilla.

    El análisis de la tabla C1 muestra que NO hay ningún caso que hable en contra de la posibilidad de ser una pieza. Está bien claro que los dos pedazos forman una sola tablilla.

 

Pág. 277 ff.  Rolf Furuli examina las figuras en la brecha horizontal en el lado inverso y contiende que: “en algunos casos las partes superiores están desplazadas a la izquierda y otras a la derecha, mientras que la mayoría de las letras no tienen ningún desplazamiento en absoluto.”

 

    La figura C.4 (Págs. 279-281) trata con las primeras 7 figuras en la línea 18.  

    1: las cabezas de las cuñas verticales de la figura “6” son pequeñas, pero claramente visibles. Hay un desplazamiento entre la fila superior y la de más abajo; pero esto no es debido a un desplazamiento de las partes de la tabilla, sino por la manera como la figura fue escrita.  La fila superior tiende a estar desplazada hacia la izquierda, o a estar más a la izquierda que la de la fila debajo; inclusive éste es el caso con el ejemplo que Rolf Furuli trae sobre el anverso. El “algo como la cabeza de una cuña horizontal” a la izquierda es una grieta; Un pedazo pequeño está roto en el borde, por lo cual es que ni S/H ni N/W mencionaron esto.

    2: la figura es un si, y únicamente es “indistinta” en la fotografía borrosa de Rolf Furuli que acompaña en la C.4 (¡no puedo evitar dejar de notar que únicamente las fotografías de la parte de atrás son las que están borrosas, mientras aquellas del lado anverso están nítidas y claras!) Hablando del ángulo de la cuña horizontal superior, Rolf Furuli puede haber equivocado la brecha por un rastro de la cuña. De lo contrario, sus comentarios son sombríos para mí; y no hay ningún desplazamiento visible.  De modo que la conclusión más natural es que esta figura es un si nítido, y puede compararse fácilmente al si fotografiado del anverso.

    3: la figura ES una e. Las dos cuñas horizontales son visibles inclusive en la fotografía de Rolf Furuli. No hay ninguna diferencia de ángulo como declara Rolf Furuli.  En mi fotografía (publicada) la parte de arriba horizontal se ve en su totalidad en la parte alta de la brecha; ningún ángulo ha de ser comparado. La “línea horizontal derecha” sólo puede representar una cuña horizontal; No veo cómo es que puede estar desplazada de sitio. La aserción que el espacio de esta figura es más ancha en la parte de abajo que la de arriba, proviene del hecho que la parte de arriba de los dos verticales a la derecha de la figura e usualmente está más alejada hacia la izquierda que la de más abajo. Hemos visto un uso similar al escribir el número 6 al principio de la línea.

    En la fotografía antigua, las partes de la figura encajan perfectamente juntas.

    4: la figura ES un gu4. No veo ningún desplazamiento en la horizontal de arriba (para el supuesto desplazamiento en la figura precedente e, vea arriba). Las dos cuñas angulares al extremo derecho de gu4 pueden verse nítidamente muy bien en la fotografía más antigua. Las propuestas lecturas alternativas no tienen sentido alguno.

    6: “El CORTE [el pedazo de abajo] y ARRIBA [el pedazo superior] se acoplan perfectamente en este lugar, y este hecho, junto con el hecho que no hay ningún desplazamiento en la figura anterior, muestra que los desplazamientos en las otras figuras son reales.” (Pág. 281)  No entiendo cuál es la lógica de esta declaración.

 

Pág. 282 ff. examina las figuras a lo largo de la parte derecha de la brecha horizontal.  

 

    La figura C.6 (línea 18):

    1: es una conjetura creíble esperar una medida después de un número y antes de las palabras “debajo de Venus”.   

    2: la brecha está justamente arriba de la parte derecha de šap, y esta es la razón de por qué nada se ve en la parte superior.

    3: dele-bad se refiere a Venus, no a Mercurio como Rolf Furuli afirma. Las dudas expresadas por Rolf Furuli sobre la figura bad probablemente son causadas por la brecha que atraviesa la figura.

    5: la figura ES un u3.  La cuña horizontal de la parte del “ši” es visible, y la segunda parte de las figuras neobabilónicas frecuentemente tienen sólo tres cuñas horizontales, vea la lista de figuras por Labat.

 

    La figura C.7 (línea 19), Págs. 283, 284:  

    1: Rolf Furuli dice que la primera parte de a-kal  “no se ve en la foto” (la fotografía ampliada en la Pág. 283).  Pero la figura está clara en la fotografía más antigua, de modo que, la fotografía no es pertinente.  No sé cuál es el a-kal en el anverso de la fotografía de Rolf Furuli, pero el a-kal en la línea 6 se parece mucho al que está en rev. 19 - de modo que NO hay ninguna discernible diferencia en el escrito.

    3: la figura que Rolf Furuli copió de Labat no es in como él reclama, sino rab (L 149); los dibujos en Labat no se alinean en la página izquierda y derecha, sino la situación se clarifica por guiones en las líneas. La forma correcta neobabilónica de in corresponde muy bien con la figura en la tablilla.  En una fotografía buena (vea a S/H plate 3) las seis cuñas angulares que están visibles.

    5: no hay ninguna duda sobre la lectura de dele-bad.  De hecho, en la fotografía de Rolf Furuli, parece que parte de las dos cuñas izquierdas están desplazadas de sitio.  No obstante en la fotografía más antigua (S/H plate 3) no hay ningún tal desplazamiento. Si como dice Rolf Furuli, esto “sugiere que pudieron haber trastocado la tablilla”, en tal caso esto, entonces, sucedió después de la fotografía más antigua, y que la copia por Weidner fue hecha.  Espero que el desplazamiento sea sólo un efecto artificial retocado en la fotografía de Rolf Furuli.

    7: Rolf Furuli menciona posibles diferentes lecturas, pero él no propone una frase de algo significante que se derribe de ello. Por consiguiente, sus propuestas tienen sólo el propósito de producir una impresión de incertidumbre.

 

    La figura C.8 (línea 20), Págs. 285, 286:  

    1: hay nada extraño sobre las dos cuñas verticales por estar más profundas; se trata del mismo caso en la figura del anverso que es comparado por Rolf Furuli.

    5: a causa de que Rolf Furuli tomó equivocadamente la figura que no era del Labat, la figura en la tablilla se ve diferente. NO hay duda alguna que un in.

    6: vea mis comentarios anteriores en 5:6.

    7: la figura era un gu4 nítido (vea la fotografía en S/H plate 3), de modo que las lecturas alternativas de Rolf Furuli quedan desechadas. Si realmente ahora contiene daños, esto sucedió después de la copia de Weidner. Sin embargo la fotografía de Rolf Furuli simplemente puede estar borrosa.

 

    La figura C.9 (línea 21), Págs. 286, 287:  

    1: Rolf Furuli cuestiona las primeras lecturas sobre las figuras: “Las cuñas de las figuras uno, dos, y tres están oscuras.  Simplemente no podemos saber cuántas figuras hay y dónde empiezan y terminan cada figura. Así que la lectura de las tres figuras ur-bar-ra, como la tienen N/W y S/H, simplemente son una conjetura”. (Pág. 286) Esta disputa es ridícula; la lectura de los anteriores editores no fue ninguna conjetura, sino una lectura. Y las figuras no están oscuras (vea la fotografía en S/H plate 3), sus perfiles se conforman a los de la lista por Labat.

    2: la figura para bar está oscura únicamente en la fotografía de Rolf Furuli.  

    3: vea anteriormente la 1.  

    6: la lectura de la figura (sip) está clara. En la detallada fotografía de Rolf Furuli está borrosa; Su fotografía ampliada en la Pág. 272, pero en la fotografía más antigua de S/H está buena.

    8: vea mis comentarios arriba 6:8 sobre la Pág. 274.  Las cuatro cuñas angulares están visibles en la fotografía antigua, y también las veo en la fotografía de Rolf Furuli. Así que la figura ES un ku4

 

    La figura C.10 (el borde superior), Págs. 287, 288:  

    1: no hay dos cuñas horizontales como contiende Rolf Furuli, sino una vertical y otra horizontal. A causa de que la cabeza de la cuña vertical es muy ancha, uno podría equivocar su punta derecha por un cuerpo de la cuña horizontal. De nuevo, la figura está bien visible en la fotografía antigua, de S/H plate 1.  Y ES un bar.

    3: hay dos cuñas horizontales en esta figura, no se trata de una sola, como así reclama Rolf Furuli; el cuerpo de la superior no es visible puesto que las cuñas verticales están dibujadas encima de ella.  Las últimas verticales consisten de dos cuñas encima de cada una; Yo puedo ver esto incluso en la fotografía de Rolf Furuli.  La “marca” debajo de la cuña horizontal es muy débil y ciertamente fortuita; hay varias de tales “marcas” en la misma fotografía y que ciertamente no fueron intencionales.

    4: vea mis comentarios arriba el 7:4  sobre la Pág. 274.

    5: la figura puede estar oscura en la fotografía de Rolf Furuli, pero está claro que es un ma en la fotografía antigua.

 

    La figura C.11 (el borde superior): Vea mi comentario sobre el 8:4 sobre la Pág. 274.  

  

La sección C3 (Pág. 291-296):   

“Una diferencia en la caligrafía en los lados del anverso e inverso”

 

 Hay siempre posibles pequeñas diferencias en los escritos de la misma persona. Para mostrar que una caligrafía es diferente, las diferencias deben ser claramente discernibles y empleadas de forma consistente.  Desdichadamente, Rolf Furuli nunca suministra el número en la línea de dónde fue que él tomó sus ejemplos. En general, solo hay una tendencia a usar fotografías borrosas, principalmente la parte de atrás.

 

     usan: las diferencias son insignificantes; el mismo número de cuñas se utiliza.

    an-ki-an: el segundo an horizontal en el lado derecho es pequeño pero visible. Por otra parte, no hay ninguna diferencia notable.

    nu: las fotografías están borrosas y son inútiles.

    si: la figura del anverso no tiene una cuña horizontal como reclama Rolf Furuli, sino una vertical (como se así se requiere para el si). La figura inversa está borrosa y sólo en parte se fotografió, de modo que una comparación no es posible.

    kur4:  la figura parece similar al si de arriba, pero ambas fotografías están borrosas.

    dib: No sé qué figura del inverso se usa pero la fotografía no está clara. Lo qué puede verse es bastante similar a la figura del anverso.

    e: la figura inversa está indefinida en la fotografía de Rolf Furuli. Para la figura del anverso, Rolf Furuli de nuevo equivoca una cuña vertical por una horizontal.

    e3: una figura puede escribirse más estrechamente dependiendo de cuánto espacio pueda haber disponible.  No veo razón por qué Rolf Furuli cree que una herramienta diferente se utilizó para el inverso.

    en: No sé que quiere decir con “más ‘primitivo’” en la figura inversa. Siendo que el lugar exacto no se proporciona, uno no puede ver la figura independientemente. La segunda cuña vertical tiene la cabeza esto inclusive en la fotografía de Rolf Furuli, aparte de que está menos clara. 

    gaz: las cabezas pueden parecer más grandes en la fotografía pero esto probablemente se debe a la claridad. La cuña angular de más abajo son muy similares en ambas figuras; en el inverso, es ligeramente más larga.

    illu: la fotografía en el inverso está tan dañada que nada puede compararse.

    ku4: las cuñas angulares perdidas únicamente faltan en la fotografía dañada del libro.

    na: esta vez el anverso de la fotografía es inservible. La forma de ambas figuras es la misma, pero nada adicional puede verse.

    pisan: No entiendo los comentarios de Rolf Furuli.  Ambas figuras tienen dos cabezas horizontales.  Siendo que no se indica el lugar en dónde se encuentran las figuras en la tablilla, la comparación se hace imposible.

    En conclusión, NO hay ninguna evidencia que dos diferentes escribas escribieron el anverso e inverso.

 

La sección C4 (Págs. 296-300) pregunta:  

“¿El nombre ‘Nabucodonosor’ y los números ‘37’ y ‘38’ son originales?”

 

    La sección empieza con una repetición de la sospecha de Rolf Furuli que la tablilla pudieron haberla trastocado. Entonces presenta una fotografía del número 37 en la línea 1.  Esta fotografía está borrosa, pero Rolf Furuli basa su discusión en ella.  Las figuras no están borradas, sino ligeramente estropeadas; lo mismo sucedió con las figuras al final de la línea 1.  Rolf Furuli dice que la última parte del número: “puede ser 7, si la figura representa un número”. Ninguna figura cuneiforme aparte del número 7 tiene esta forma, de modo que si se está haciendo una cláusula es una superflua y engañosa.  Si Rolf Furuli hubiese observado la fotografía antigua (en S/H plate 3), él podría haber comprobado que hay tres cuñas angulares, como se requiere para hacer un “30”.  Él también podría haber visto que la “marca que podría ser el resto de una cuarta cuña angular u oblicua” con toda probabilidad se trata de un rallazo.  Definitivamente es imposible leer el número 50 e incluso 40.  Es extraño que no ocurra un kam después del 37; pero siendo que un kam está presente en los demás casos de los números de años en la tablilla, puede asumirse que esto fue un error del escriba.

    Rolf Furuli crea un revuelo por la apariencia diferenciada del número 38 en el borde de la tablilla cuando la comparó con los otros números “8”.  Sin embargo, esta diferencia puede explicarse por el hecho que esta línea está escrita en el borde.  Para escribir en el borde, la tablilla debe sostenerse por el borde, y la mano no puede ponerse en la tablilla para encontrar soporte y poder escribir.  Pero sea que esta explicación fuese verdad o no, el número es claramente un 38.  No es necesario asumir que fue con una herramienta diferente, pero si fuese el caso la herramienta pudo haber sido sólo una aguja de carrizo.  Un taladro o una máquina de tallar nunca habrían producido marcas como aquéllas de una aguja.  Como el 37 en el borde es bastante normal, Rolf Furuli admite que puede ser original, pero todavía supone que alguien pudo haber trastocado la tablilla y que en este caso “pudo haber tenido mejor resultado que en el caso con el número 38”. (Pág. 299). 

    En la Pág. 300, Rolf Furuli dice: “La conclusión es que hay varias pistas que las fechas fueron incisiones en la tablilla en los tiempos modernos, pero de cualquier modo la evidencia no es conclusiva.”  Más bien, la conclusión debe ser, que incisiones en los tiempos modernos no se han probado.  Existen expertos en tales materias que podrían determinar con certeza con que herramienta las impresiones se habrían hecho. Ninguno de tales expertos ha sido consultado por Rolf Furuli.

 

La sección C5 (Págs. 300-316) considera la

“Identificación de los cuerpos celestes”

La tabla C.2 examina las posiciones de los planetas y estrellas.

 

    (Línea) 2: la figura an podría referirse a Marte como dice Rolf Furuli, pero no aquí donde es un determinativo. En el S/H, se asumía que el sim era una abreviación de sim-mah que es una palabra para golondrina.  La traducción es literal, pero por otros textos se sabe que la “golondrina” es parte de Piscis.  Las otras lecturas para la figura de sim listadas por Rolf Furuli están totalmente equivocadas, ellas se refieren a figuras diferentes. Si la figura estuviese dañada, le podría dar a uno qué pensar sobre estas lecturas, no obstante la figura está clara. Por consiguiente, sólo las primeras en dos de las seis traducciones propuestas por Rolf Furuli son significantes (“ ‘Saturno estaba delante de sim.’  ‘Saturno estaba delante de Piscis.’ ”).

    4: ana ūmi elû es un término técnico para el “nacer acrónico”.  Las otras traducciones han sido malentendidas. El significado del texto es verídico.  El nacer acrónico en el 568 a.C. se ha calculado que se realizó en el Mes I, día 14.  En el 588 a.C., ocurrió en el mes VI; así que el 588 a.C. no encaja, contrario a las reclamaciones de Rolf Furuli que: “la información encaja con ambos el 588 y 568”.

    9: genna sólo se indica en la Labat en su forma Asiría, no obstante en la Labat se declara que está compuesto de TUR+DIŠ. Esta tiene dos cuñas verticales, contrario a la declaración de Rolf Furuli.  En la VAT 4956, la figura está compuesta del TUR en su forma neobabilónica conjuntamente con DIŠ (una sola vertical).  Los comentarios restantes de Rolf Furuli sobre la figura están todos equivocados.

    ina igi no puede significar “sea visible”. Si el igi ha de ser leído como una forma de amaru, ina amari significa “viendo en”. Pero aquí igi ha de ser leído panu “frente”.

    Los comentarios sobre sim al igual que anteriormente están equivocados. De forma similar, los comentarios que hace Rolf Furuli sobre mah se relacionan a sucesos que no están escritos en la tablilla por lo tanto pueden ignorarse. Las “posibilidades” restantes sólo existen con tal de que uno no intente producir una frase acadia concordada; una vez esto se tome en cuenta, los significados quedan claros.

    10: El dele del dele-bad está claramente visible en la fotografía antigua.  Y la figura NO es un tar como afirma Rolf Furuli.  Las palabras sobre Venus son del remanente de una observación de la luna cual dice que estuvo al oeste de Venus.  La formulación es una bastante característica y puede encontrarse frecuentemente en los diarios subsiguientes, por ejemplo en el Núm. ‑378:11’.  Rolf Furuli afirma: “Las palabras pueden interpretarse de diferentes maneras y pueden encajar con ambos el 588 y 568 a. E.C.”; sin embargo en el 588 Venus era un lucero de la mañana lo que no encaja con el texto.

   10: en la discusión de alla y ku4 introduce figuras que no son visibles en la tablilla y consecuentemente no son de ninguna importancia. Sin embargo, hay que enfatizar que ku4 está correctamente escrito, y se ve exactamente en la misma forma neobabilónica como se muestra en la Labat.

    Los comentarios sobre ud y du son un excelente ejemplo de cómo los lectores pueden ser guiados por Rolf Furuli para pensar que hay posibles significados para las figuras que han sido pasadas por alto por los primeros traductores.  Rolf Furuli dice en la Pág. 304 que: “usando a ‘Praesepe” como una referencia para alla es, hasta donde yo sé, algo sin paralelo en los otros diarios, y no deben usarse”.  Pero sí hay expresiones similares en la ADRT V Núm. 54 rev. III 17’ y 61 rev. III 16, dónde una traducción de “Praesepe” encaja con el contexto (y la astronomía).  Cuando escogí a Praesepe como un significado más preciso para alla en esta línea, lo hice a causa de las observaciones ya informadas: en menos de 2 días, Marte no podría moverse a través de todo Cáncer, por lo tanto aquí alla solo podía haber significado ser parte de la misma, y el utilizar Praesepe es posible, como ya se ha declarado por N/W. Por otro lado, una traducción de “el 5º, sopló una tempestad” es imposible puesto que ud nunca se usa para tempestad en los diarios. e3 (ud.du), “para salir”, es natural después de “para entrar”.

    La posición de Marte en Cáncer es imposible en el 588 a.C., si bien la posición no está equivocada, contrario a lo que dice Rolf Furuli, que fue para el 568 a.C.

    10: la figura ud NO tiene una cuña oblicua adicional para parecerse a pi como es reclamado por Rolf Furuli; esta cuña adicional ha de ser leída ina.  Los comentarios restantes de Rolf Furuli sobre esta figura están equivocados.  šu2 quiere decir “la puesta”, pero ina šu2 sólo puede significar “en el oeste”.  Del mismo modo puede significar “durante puesta”, pero eso no proporciona una frase significante.

    En cuanto a la figura de maš Furuli afirma: “La forma de la figura es extraña, y nada se ve de una figura del tab siguiente” (Pág. 305). Pero maš no es extraña, y el principio de la figura tab siguiente está claramente visible en la fotografía.  Las posibilidades de las interpretaciones mencionadas por Rolf Furuli no existen. Restauré “rose” que no está preservado en la tablilla puesto que un fenómeno de Mercurio estaba bajo expectativa, y una primera visibilidad ocurrió en el oeste el 12 de Ayyaru.

    11: en los textos astronómicos, lugal NO puede referirse a Marte o α Centauro.  En cuanto a los cómputos, es desafortunado que Rolf Furuli haya escogido el sistema de horizontes pues varía a lo largo de la noche.  En el sistema eclíptico, Venus está claramente sobre Régulo para la fecha del 568 a.C., pero a poco menos de un codo.

    12: en el 1 de Simanu como es dado por Rolf Furuli, Mercurio y Marte estaban aproximadamente a 8° en la longitud de Régulo que corresponde bien a 4 codos.  Al escoger las coordenadas del horizonte, Rolf Furuli solo consigue confundir los resultados.

    13: como declaré en la edición de los Diaries [“Diarios”], hay problemas entendiendo el šer-tam DIB; pero no hay problema alguno en cuanto a identificar las figuras, contrario a los comentarios confusos por Rolf Furuli, a dib NO le falta su cuña vertical, está justamente debajo de la parte más alta horizontal.

    13: si4: quizás no sea posible para Rolf Furuli conocer cuál es la figura que está escrita, pero ES un si4 y significa Antares. ¿Por qué dice que la figura dele no está conectada con bad?  Si uno la conecta a la figura anterior, no surge ningún significado. El listar posibles significados de bad qué no son aplicables aquí, sólo producirá confusión. 

    el tar no es extraño, sino una forma frecuente neobabilónica de la figura. Por supuesto una buena gramática requeriría ana tari, pero en conclusión en el neobabilónico no se percibe bien.

    kun pueden ser zibbatu, pero giš.kun es rapaštu.  Así que giš.kun aquí no puede referirse a Piscis, y rapaštu es una parte muy conocida de la constelación del león.  ur no es difícil de interpretar, pero sí difícil de explicar. La figura está allí, y confirma que estamos tratando con una estrella en el León.

 

    3’: En cuanto a la figura mul, Rolf Furuli dice: “La figura es extraña y difícil de identificar. … La figura de mul y las siguientes cuatro figuras apenas podrían leerse como N/W y S/H lo hacen si ya Capricornio no se hubiese calculado para ser la estrella mencionada” (Pág. 309). No obstante, mulx no es una figura extraña; es la AB2.  Y está presente en varias ocasiones en la tablilla (y también en otras) como una figura para “estrella”.  Las cuñas de murub4 no son confusas sino están claras; hay un pequeño daño en la parte más alta del mismo pero no le falta ninguna cuña.  La ša2 no está borrada sino rota en una parte.  En cuanto al si, la parte superior horizontal está rota, no borrada; La figura puede identificarse. Y la maš2 se ve como se supone que vea (y con frecuencia se encuentra en los diarios), vea la forma neobabilónica en la Labat Núm. 76.  Por lo tanto, no puedo entender por qué Weidner, Sachs y yo no somos considerados lo suficientemente competentes para poder hallar la lectura correcta sin hacer cómputos.

    5’: el ki es cierto. ṣir está exactamente como se debe en el neobabilónico; La declaración de Rolf Furuli que ṣir tiene tres cuñas verticales es correcta pero sólo para el neoasirio, de modo que sus comentarios no vienen al caso.

    La figura no está borrada, sino tiene el extremo quebrado.  bil tiene dos cuñas horizontales al principio, y también lo tiene la figura aquí; La declaración de Rolf Furuli que tiene sólo una horizontal está equivocada.  pa NO puede leerse como giš, y la siguiente figura tampoco es ningún da, así considerado a Hyades no tiene fundamento.  Por lo tanto, las traducciones de Rolf Furuli tienen que ser desechadas.

    6’: el suhur está algo abreviado en los diarios, no obstante la forma que se ve aquí es la habitual.  La maš2 se ve exactamente como la figura debe verse para el neobabilónico (vea Labat), y no es confusa.  Al tiempo que “el nombre completo de Capricornio” es “suhur maš2”,  usualmente la maš2 es la abreviación que usada en los diarios y en los demás textos astronómicos.

    En cuanto a la posición de Venus, “debajo” probablemente es un error para “arriba” porque Venus casi nunca tiene una latitud suficientemente negativa en Capricornio para estar debajo de γ ni δ Cap.  Como de costumbre, Rolf Furuli sospecha que hubo cálculos.

    19’: dele-bad ya se discutió aquí arriba en la Figura C.7.

    ana NO está borrada sino está completa y clara.  dur NO está borrada sino ligeramente deteriorada. Se puede ver bastante bien.

    sim no es rara, sino tiene la forma requerida para el neobabilónico; No le falta ninguna cuña. Lo mismo sucede con mah; se ve exactamente como el ejemplo que está en Labat.

    En cuanto a la figura ku4, Rolf Furuli dice: “La figura tiene un poco de parecido con la ku4, pero asimismo hay varias diferencias” (Pág. 312). la ku4 tiene tanto parecido con la ku4 que solamente puede ser una ku4.

    Una observación de este tipo puede ayudar a encontrar donde se encuentra la “band” [“franja”] que conecta un pez con los otros, pero no puede demostrarse que es correcto.

    20’: para la supuestamente invisible gu4 vea mis comentarios aquí arriba en la Figura C.8

    Hay un rallazo horizontal debajo del dele de dele-bad. Uno no puede formar un igi debido a esto, ni con el u precedente como hace Rolf Furuli dele no pueden interpretarse como idim; Podría ser bad, pero no tiene sentido alguno aquí.  Los dioses mencionados por Rolf Furuli tendrían que ser identificados por el determinativo divino. Sólo la lectura dele-bad para Venus es la posible.  En cuanto al nombre Anunitu, las figuras a y nu están conservadas (como también puede verse en la fotografía de Rolf Furuli en la Pág. 272).  La “conjetura” para restaurar Anunitu está basado en el hecho que una “band” [“franja”] es mencionada antes. De modo que la restauración no se trata de ‘nada más que conjetura’ (Pág. 312), sino está basada en hechos razonables.

 

La tabla C.4 (Págs. 315-316):

Las interpretaciones alternadas de las figuras cuneiformes

    La mayoría de los errores en esta tabla ya se han expuesto aquí arriba.

 

1 de Nisanu: Sólo una interpretación sobre Piscis es posible.  

11 o 12 de Nisanu: un sólo “nacer acrónico” es posible.  

1 de Ayyaru Saturno: Vea aquí arriba la Tabla C.2;  todas las traducciones por Rolf Furuli están equivocadas.  

1 de Ayyaru Mercurio: Sólo “no era visible” es lo correcto.  

3 de Ayyaru: La figura es Cáncer; todas las demás traducciones están equivocadas.  

10 de Ayyaru: sólo “Mercurio en el oeste” es posible.  

18 de Ayyaru: Vea aquí arriba en la Tabla C.2 en la línea 11. lal2 significa poner “en peso”, no “a atarle”.  

1-5 de Simanu: La mayoría de las traducciones de Rolf Furuli son imposibilidades. 

19 de Tebetu: β Capricornio es cierto.  

1 de Šabatu: Las traducciones de Rolf Furuli están equivocadas; el único nombre que puede restaurarse es Sagitario. 

4 de Šabatu: Capricornio es cierto. 

Addaru c. 20 y 26: Venus y Mercurio son ciertos.  

 

    La conclusión es que las “alternativas” de Rolf Furuli están basadas en un entendimiento equivocado.

 

Sección C6 (Págs. 316-333) se discute

 

“las observaciones lunares”

El trato de los datos lunares de Rolf Furuli ha sido examinado por C. O. Jonsson en la Internet diríjase al portal http://goto.glocalnet.net/kf2/sreview.htm.  Jonsson demuestra que los datos se ajustan al 568/7 a.C., y no al 588/7 a.C. como reclama Rolf Furuli.

 

    A los cálculos de Jonsson no necesito agregarle nada, con el cual estoy completamente de acuerdo. Por lo cual me limitaré a unos comentarios sobre la traducción:

    1 de Nisanu: Puede parecer innecesario comentar sobre esto, pero el significado ingresivo “se hizo visible” probablemente se deduce de la lectura innamir del verbo, y del hecho que la luna no era visible en los días anteriores, de modo que  “se hizo visible” de nuevo.

    1 de Ayyaru: “the moon in the sun standing” [“la luna en el sol parada”] es seudo-literal puesto que no es un inglés correcto — o puede entenderse como“the moon standing inside the sun” [“la luna parada dentro del sol”]. La forma de construcción infinitivo Akadio {o Acadia} ina šamši uzuzzi puede traducirse como “during the standing of the sun” [“durante la parada del sol”]; intenté darle un verter inteligible utilizando “while the sun stood there”. [“mientras el sol estuvo en dilación allí”]. Vea a W. von Soden, Grundriss der akkadischen Grammatik, § 150 g.

    5 de Simanu: No puedo encontrar qararu “denso” en los diccionarios Akadio modernos.  De todas formas, en la frase “denso final”, al adjetivo tendría que seguirle el sustantivo en Akadio.  Hay también un ša2 entre el kur4 y el til.  De modo que la traducción correcta sigue siendo “la estrella luminosa al final del pie del León”.

    1 de Addaru: Rolf Furuli argumenta que: “La expresión ‘en ese tiempo’ en correlación con Júpiter es interesante, ya que sugiere que las posiciones planetarias se tomaron de una fuente diferente que las posiciones lunares” (Pág. 329). No hay razón alguna para asumir que las posiciones planetarias se tomaron de una fuente diferente. inūšu (“en ese tiempo”) empieza una nueva oración, por lo tanto la posición de Júpiter es independiente a la de la luna.

Puede ser interesante mencionar un acercamiento completamente diferente para evaluar los datos lunares.

    En el Under One Sky: Astronomy and Mathematics in the Ancient Near East [“Bajo Un Cielo: Astronomía y Matemáticas en el Antiguo Cercano Oriente”] (J. M. Steele y A. Imhausen [eds.], Münster 2002), Págs. 423-428, F. R. Stephenson y D. M. Willis han evaluado los datos lunares en la VAT 4956 y han llegado a la conclusión que la fecha del 568/7 a.C., puede “afirmarse confiadamente”.

    Stephenson y Willis utilizaron el “Lunar Tres” para verificar la fecha. Éstos son los siguientes intervalos de tiempo: del ocaso a la puesta de la luna (SS-MS por sus siglas en inglés) en la primera tarde del mes; de la salida del sol a puesta de la luna (SR-MS por sus siglas en inglés) en la primera mañana en el cual la luna llena se puso después de la salida del sol; y de la salida de la luna a la salida del sol (MR-SR por sus siglas en inglés) en la última mañana en la cual la luna fue visible antes de la conjunción.  Les repito la tabla de su artículo en la Pág. 424:

 

Año 568/7 a.C., empezando el 22/23 de abril 

Mes 

Día 

Fecha Juliana 

Intervalo 

Texto 

Computado 

Diferencia 

I

14

5 de Mayo de 568

SR-MS

4

3.5

0.5

II

26

17 de junio de 568

MR-SR

23

23.2

0.2

III

1

20 de junio de 568

SS-MS

20

22.7

2.7

XI

1

12 de Feb. de 567

SS-MS

14.5

17.0

2.5

XII

1

14 de marzo de 567

SS-MS

25

25.7

0.7

XII

12

26 de marzo de 567

SR-MS

1.5

0.7

0.8

 

    Como Stephenson y Willis afirman, cada intervalo aumenta aproximadamente unos 12° por día, de modo que el día correcto normalmente puede identificarse comparando el texto con el cómputo. He repetido sus cómputos para el 568/7 a.C., y estoy de acuerdo con los resultados de ellos.  En lo siguiente, hago los mismos cómputos para el año 588/7 a.C., ambos para las fechas dadas por Parker & Dubberstein, y para aquéllas reclamadas por Rolf Furuli, las cuales varían por aproximadamente un mes.

 

Año 588/7 a.C., empezando el 3/4 de abril  

Mes 

Día 

Fecha Juliana  

Intervalo 

Texto

Computado 

Diferencia 

I

14

¡17/18 de abril de 588!

SR-MS

4

6

2

II

26

28/29 de mayo de 588

MR-SR

23

17.3

5.7

III

1

1/2 de junio de 588

SS-MS

20

13.8

6.2

III

15

15/16 de junio de 588

SR-MS

7.5

5.8

1.7

XI

1

24/25 de enero de 587

SS-MS

14.5

16.5

2

XII

1

23/24 de Feb. de 587

SS-MS

25

27.8

2.8

XII

12

¡7/8 de marzo de 587!

SR-MS

1.5

1.8

0.3

 

  

Año 588/7 a.C., empezando el 2/3 de mayo 

Mes

Día

Fecha Juliana

Intervalo

Texto

Computado

Diferencia 

I

14

¡16/17 de mayo de 588!

SR-MS

4

1

3

II

26

¡27/28 de junio de 588!

MR-SR

23

18.3

4.7

III

1

¡1/2 julio de 588!

SS-MS

20

17.8

2.2

III

15

¡15/16 de julio de 588!

SR-MS

7.5

15.3

7.8

XI

1

22/23 de Feb. de 587

SS-MS

14.5

9.8

4.7

XII

1

24/25 marzo de 587

SS-MS

25

21.5

3.5

XII

12

¡6/7 de abril de 587!

SR-MS

1.5

4.8

3.3

 

Las fechas con los signos de exclamación discrepan con el calendario, en el sentido que las medidas de los intervalos no podrían tomarse por la fecha que se da en la tablilla, esto si la tablilla estuviese refiriéndose al año 588/7.  Las diferencias entre el texto y los cómputos en ambos casos son mayores que en el 568/7 a.C.  Utilizando entonces las palabras de Stephenson y Willis, el 588/7 a.C. pueden confiadamente excluirse.

 

“Apéndice D:  El Uso de Nombres en Akadio” (Págs. 334-336)

 

El apéndice D, “El Uso de Nombres en Akadio”, sólo produce incertidumbres al proporcionar ejemplos de lecturas equivocadas de tales nombres, aún por eruditos competentes, o al diferir opinando sobre pasajes que están deteriorados. Las formas del nombre del rey babilónico Nabû-kudurru-uṣur en la Biblia no puede utilizarse para hacer alguna declaración sobre los nombres en Akadio ya que los escribas bíblicos no necesariamente hubiesen entendido el nombre y fácilmente podrían deletrearlo mal. De modo que esto no es justificación alguna para atribuirle dos nombres al rey.

    He comentado aquí arriba sobre la interpretación de los nombres para el apéndice cual se supone preparase el camino.

 

“Apéndice E:  Una tablilla de Saturno Supuestamente del Reinado de Kandalanu” (Págs. 337-351)

 

El Apéndice E se refiere a una tablilla publicada por C. B. F. Walker concerniente a Saturno.  Empieza listando únicamente las figuras que están conservadas completamente, haciendo traducciones de éstas.  Los pasajes rotos sólo se indican parcialmente, de modo que esta tablilla suministra una impresión incierta de lo que está en la tablilla.  También hay errores en las traducciones.

    Lo siguiente tiene que revelase de los comentarios por Rolf Furuli:

    Línea 1: la figura en cuestión se parece más a un nu que a un pap, ya que la cabeza de la cuña oblicua que cruza está debajo del horizontal; La declaración contradiciendo de Rolf Furuli, se ha demostrado por la copia que es falsa.  Y esto se aplica a cada una de las tres veces que aparece esta figura; ya que SIEMPRE se trata de nu. Si Rolf Furuli puede traer evidencia de alguna otra parte (¿una fotografía?), tendría que ser algo que esté declarado bien claro.  Por consiguiente, asumir que posiblemente se menciona Nabopolasar en la línea 1 no tiene base alguna.

    Línea 4: Walker NO dice que nu significa “no visto” sino lo que hace es que restaura igi después de nu.

    Línea 6: Cómo en la VAT 4956 se escribe mul no es de importancia alguna para la tablilla presente. Hay más de una manera de escribir el determinativo de la estrella.

    Línea 7: La traducción de Rolf Furuli: “al final del mes IV nube no” está desacertada ya que él omitió parte de la línea; La traducción correcta es: “al final del mes IV, su última aparición; no se observaron nubes.”

    Línea 8: en tal caso el escriba mostraría ser un incompetente empleando NIM para indicar “mañana” puesto que las primeras apariciones de Saturno siempre son en la mañana.  Las figuras significan “era en lo alto” (šaqâ = NIM-a), algo que es frecuente en los diarios.

    Línea 9: dado a las fechas del calendario, es superfluo considerar significados como la “nube encima” y “ser oscuro”; las fechas claramente se refieren a las últimas apariciones, como Rolf Furuli de todos modos acepta.

    Línea 15: “Año 8 mes VI, día 5 detrás de AB.SIN está bajando”; Rolf Furuli no traduce que el mes VI era intercalado; y ŠU2 no es “está bajando”.

    Línea 16: si Saturno estaba entre Virgo y Libra, la restauración de ina [DAL]-BAN es una buena idea por Walker.

    Línea 18’: los escritos que combinan sílabas y logogramas sí ocurren ocasionalmente. ša3 es libbu,  y está correctamente traducido por Walker como “within”  [‘en, o a menos de, al alcance de, dentro, adentro’].

    Línea 20’: ba-il significa “estaba claro”; la palabra en el Akadio no puede referirse a “regente”.

    Línea 23’: la traducción de muššuh puede estar abierta a discusión, pero en cuanto a “Hydra” [“Hidra”] de eso ni hablar, ya que ŠU2 acontece ante que éste; la indicación de dónde el planeta estaba en su última aparición habría precedido ŠU2. ‘Hydra’ [“Hidra”] del mismo modo es un imposible ya que, ¿si Saturno estaba cerca de Antares (Scorpius) [“escorpión”], en el Año 11, y gradualmente estaba moviéndose dentro de la región de Ophiuchus/Sagittarius [‘Sagitario’] cómo es que de repente aproximadamente un año después en el Año 12, pudo saltar hacia atrás 30+ grados en dirección opuesta a Hidra en los meses intermedios?

    En la Pág. 340 Rolf Furuli hace la errónea declaración que, las palabras refiriéndose a partes del cuerpo de las constelaciones no son posibles para el 7º siglo puesto que requeriría tener un conocimiento de las diferentes figuras del zodíaco. Yo no entiendo cómo es que él llega a esta opinión; quizás la razón es porque no entiende la diferencia entre las constelaciones zodiacales y las figuras zodiacales.

    En la Pág. 341 Rolf Furuli da coordenadas para Saturno y ε Leonis de varios años, las cuales tienen una separación de 59 años.  Entonces él afirma que en el 646: “Saturno no estaba en la cabeza del León sino a 7° debajo”.  Esto es inevitable porque la latitud de Saturno nunca puede estar a más de 2.9°, y ε Leonis tiene una latitud de 9.5°. Además, el uso del sistema de coordenadas del horizonte malogra la situación ya que sus coordenadas cambian durante el curso de la noche.  Walker utilizó coordenadas eclípticas; la longitud de Saturno es un mucho mejor indicador de lo cerca que el planeta estada de la estrella.  Rolf Furuli también ignora que la primera y última aparición no tienen que suceder cerca de una estrella sino que puede suceder a unos grados distantes del mismo. El observador tendría la tendencia a usar estrellas muy conocidas como referencia.  Por consiguiente, a menos que se den las distancias entre Saturno y una estrella, no es significante buscar un “ajuste”.

 

    Año 2: Saturno está a medio grado detrás de ε Leonis, de modo que refiriéndose a la “cabeza del León” está correcto.

    Año 4: “en el medio del León” es correcto porque la cabeza del León (ε) está a 104° y su pata trasera (β Vir) a 140° de longitud.

    Año 6: que Saturno estaba mucho más bajo que β Virginis no es importante; pero Saturno también estaba bastante detrás de él. 

    Año 7: Saturno está un poco  (0.2°) detrás de α Virginis.

    Año 8, última aparición: Saturno estaba 8° detrás de α Virginis, por consiguiente “detrás del Surco” como lo declara la tablilla. No hay ninguna otra estrella resplandeciente para referirse. La distancia en la latitud es sólo de 4°.

    Año 9: las dudas de la lectura por Rolf Furuli no son necesarias.

    Año 10: entre tanto los diarios posteriores hablan de la “cabeza del Escorpión” y esta tablilla tiene la “frente del Escorpión”, por lo tanto es probable que se quiere decir β Scorpii.  Su longitud es 207.1°, en consecuencia Saturno está delante del mismo; y su latitud es 1.34°, no distinta a 2.2° cual se suministra en el texto de Walker para Saturno. 

    Año 12: Siendo que no se conoce cuál estrella de Sagitario (y Ophiuchus) se significó con “principiando, cabeza” y en el “medio” de Pabilsag, uno no puede declarar que “la posición de Saturno está equivocada”.  Walker mencionó dos estrellas (β Ophiuchi [Pág. 72] y θ Ophiuchi [Pág. 74]) las cuales habrían estado en la posición apropiada, pero no sabemos sus nombres en Akadio.  Suposiciones a cerca de cálculos hechos al revés no son requeridas por el texto.

    Año 13: vea el año 12.

 

    Contrario a las reclamaciones en la Pág. 345 por Rolf Furuli, de las trece posiciones una está equivocada (año 7), una es extraña (año 6), no pueden verificarse dos (año 12 y 13), y siete encajan bien.  No hay razón alguna para asumir cálculos hechos al revés debido a lo no se concierta con los datos.

 

    La tabla E.2 (Págs. 346-347) suministra diferencias entre las últimas y primeras apariciones en el texto y de acuerdo con los cálculos.  “En el texto” significa que el número del año se asume sean los años de reinado de Kandalanu (por Walker) o los años de reinado de Nabopolasar (por Rolf Furul).  Como ha de esperase, se hallan diferencias entre el texto y los cálculos, asimismo Rolf Furuli admite (Pág. 349) que con su proposición las diferencias son todavía mayores. Pero él además de considerar esto como algo no decisivo, también asevera que ambas(¡!) proposiciones “corroboran cálculos retrospectivos”.  E incluso, la secuencia de los meses intercalados, que brevemente se discuten en la Pág. 350, él asume que ha sido el producto del escriba quien hizo los cálculos al revés.

 

“Apéndice F:  ¿Cuáles Posiciones Podrían Calcularse?” (Págs. 352-362) 

Primero Rolf Furul cita a varios eruditos modernos quienes declaran su creencia que se podrían predecir posiciones.  Esto significa que se podría de antemano calcular posiciones futuras.  Sin embargo Rolf Furuli toma esta declaración para justificar su creencia que las posiciones se calcularon al revés.  En la Pág. 353, en el último párrafo, él además introduce la sospecha que un escriba por medio de cálculos hechos hacia atrás quiso darle una impresión engañosa a sus lectores que las demás posiciones fueron observadas.  Su declaración donde se pronosticaron las condiciones del tiempo en los Goal Year texts [“textos de años de meta”] está errónea; no hay ningún detalle sobre las condiciones del tiempo en ellos.  La única condición del tiempo que se cita es, las “nubes” y está dentro del contexto de las observaciones del pasado para explicar la falta de ciertos datos.

    En la Pág. 355, Rolf Furuli cita a D. Brown como una fuente para su conclusión de “que no hay ninguna evidencia de cartas e informes con contenido astrológico de que un conocimiento detallado de los ciclos de la luna y planetas existiese en ese tiempo”.  No obstante, esa es exactamente la razón por la cual los textos de ese tiempo (aun si fuesen copias preservadas) han de tener observaciones, y sólo en muy raras ocasiones pronósticos.

    En las páginas siguientes, unos pasajes de correspondencia astrológica sobre los reyes Asirios del siglo 7º se utilizan para encontrar ya sea si las constelaciones a lo largo de la eclíptica se avistaban como animales. Hay varias citas que están incorrectas aquí, además de que Rolf Furuli no puede comprender que la palabra para “estrella” igualmente se emplea para constelaciones enteras.  Es por eso que su conclusión que las constelaciones del siglo 7º tenían una referencia diferente a las figuras zodiacales de la segunda mitad del primer milenio no tiene fundamento alguno.  Como correctamente él mismo afirma, el zodíaco de 12 figuras de igual longitud se introdujo en el siglo 5º; antes de eso, varias constelaciones a lo largo de la eclíptica fueron utilizadas cuyos tamaños variaban unas de otras y no podían determinarse fácilmente.

    En la Pág. 359, Rolf Furuli reclama que: “ningún erudito negaría que sí ocurrieron cálculos hechos al revés”.  Pero los eruditos que él cita sólo hablan de “predecir”, y no de cálculos hechos al revés.  Rolf Furuli aduce como ejemplo los Goal Year texts [“textos de años de meta”], citando a  D. Brown. Pero de nuevo, Brown sólo habla de “predecir”.   Los textos Goal Year texts [“textos de años de meta”] se nutren, de los diarios más antiguos, eso datos para cada planeta que son de un solo período completo antes de los Goal Year texts [“textos de años de meta”]. Por lo tanto estos textos hacen predicciones para el futuro gracias a las observaciones del pasado.  De modo que no hay ninguna necesidad de hacer cálculos hacia atrás; ya que los escribas tenían los archivos de las observaciones del pasado, y ellos las utilizaban para predecir fenómenos futuros.  Intentar calcular posiciones en el pasado debe haberle parecido superfluos a los autores de los textos Goal Year texts [“textos de años de meta”]

    Por consiguiente, la “evidencia” de unos cálculos hechos al revés sólo está basada en una sospecha moderna.

    El autor declara en su prólogo: “Ninguna reclamación es hecha que la cronología de Oslo es la única verdadera y fiable cronología”. Contiguo con esta reclamación que ha hecho que la cronología de Oslo NO es una verdadera y fiable cronología.

 

 Una Sección Emocional:

 

Al final, siento que tengo que agregar una sección emocional. En la Pág. 290f., leemos:

 

     “Una consideración de los datos arriba juntos con la inusual historia de la publicación de la tablilla conduce a la siguiente hipótesis: La VAT 4956 es una auténtica tablilla cuneiforme que fue copiada de tablillas más antiguas en uno de los últimos siglos a. E.C.  Llegó al Museo de Vorderasiatische en Berlín en 1906 como una sola entidad.  Alguien descubrió que la tablilla era extremadamente importante puesto que era una tablilla astronómica con las observaciones astronómicas hasta ahora más antiguas.  Estas observaciones parecen encajar con el año 37 de Nabucodonosor II según la cronología de Tolomeo, pero le faltaba una clara conexión con Nabucodonosor II.  Para poder hacer perfectamente clara esa conexión, el que estaba trabajando con la tablilla usó una máquina de tallar moderna en el borde de la tablilla, tallando así las figuras para el ‘año 37’ y ‘año 38’.  La primera línea con el nombre del rey también fue manipulada.  Debido a la vibración, la tablilla se rompió en tres pedazos los que entonces se pegaron.  Fue descubierto que el ajuste de las figuras en ambos lados de la rotura en el lado reverso no estaban perfectos, y una máquina de tallar fue utilizada para tratar de remediar esto.”

 

Y en la Pág. 333 dice:

 

    “Basado en la discusión de la VAT 4956 se pueden sacar las siguientes principales conclusiones: El Diario puede ser una tablilla genuina hecha en los tiempos seléucida, pero alguien en tiempos modernos ha trastocado algunas de las figuras cuneiformes, o, la tablilla fue hecha en tiempos modernos; el lado del anverso fue hecho con la ayuda de un moldeador, y las figuras en el lado reverso y los bordes fueron escritas por alguien. Debido a la excelente precisión de todas las 13 posiciones lunares en el 588/87, hay buenas razones para creer que las posiciones lunares representan observaciones de ese año, y que la tablilla lunar original se copió en los tiempos seléucidas, un acontecimiento en el 588/87.  Debido a que tantas de las posiciones planetarias están aproximadamente correctas, pero no completamente correctas, hay buenas razones para creer que ellas representan cálculos hechos al revés por un astrólogo quien creyó que el 568/67 era el año 37 de Nabucodonosor II.  Hasta este punto, las posiciones lunares parecen ser observaciones originales del 588/87, y las posiciones planetarias parecen ser cálculos hechos al revés para las posiciones de los planetas en el 568/67.”

 

 

    Esta conclusión acusa a una persona anónima de actos delictivos: por lo menos que esa persona “ha trastocado algunas de las figuras cuneiformes”, y del mismo modo puede verse implicada falsificando la mitad de la tablilla.  Siendo que la tablilla llegó al Museo de Vorderasiatische en 1906 y se publicó en 1915 en la condición que está reflejada en la fotografía que está en los archivos del Museo, la imputación involucraría a cualquier persona que trabajasen allí en ese momento, incluyendo por ejemplo a Ernst Weidner.  En su defensa, y de todos los demás que posiblemente sean implicados, yo declaro que la imputación no tiene absolutamente base alguna, y expreso mi indignación sobre un autor cuya “imparcialidad” lo lleva hacer tales acusaciones.

 

Hermann Hunger

Viena  

 

    Referencias:

 

ADRT I (S/H) – Sachs, A. J. y H. Hunger, Astronomical Diaries and Related Texts from Babylonia, [“Diarios Astronómicos y Textos Relacionados de Babilonia”] Vol. I: Diaries from (“Diarios desde el”)  652 a.C. al 262 a.C. (Wien: Verlag der österreichischen Akademie der Wissenschaften, 1988).

 

ADRT II (S/H) – Sachs/Hunger, ibíd., Vol. II: Diarios del 261 a.C. al 165 a.C. (Wien 1989).

 

ADRT III (S/H) – Sachs/Hunger, ibíd., Vol. III: Diarios del 164 a.C. al 61 a.C. (Wien 1996).

 

ADRT V (S/H) – Sachs/Hunger, ibíd., Vol. V: Lunar and Planetary Texts [“Textos Lunares y Planetarios”] (Wien 2001).

 

ADRT VI – Hunger, ibíd., Vol. VI: Goal Year Texts [“Textos de Año de Meta”] (Wien 2006).

 

AfO, 1953 – Archiv für Orientforschung, Band XVI, Zweiter Teil (1953).

 

AoF 35 – Altorientalische Forschungen, Vol. 35 (2008).

 

Brinkman, J. A., A Political History of Post-Kassite Babylonia, [“Una Historia Política Posterior a Kassite, Babilonia”] 1158-722 a.C. (Rome: Pontificium Institutum Biblicum, 1968).

 

Brown, D., Mesopotamian Planetary Astronomy-Astrology [“Astronomía-astrología Planetaria Mesopotamia”] (Groningen: Styx Publications, 2000).

 

Diaries – vea a ADRT I, II, y III.

 

Grayson, A. K., Assyrian and Babylonian Chronicles [“Crónicas Asirías y Babilónicas”] (Locust Valley, N.Y.: J. J. Augustin, 1975; reimprimida por Eisenbrauns, 2000).

 

Huber, Peter J., y Salvo De Meis, Babylonian Eclipse Observations from [Observaciones de Eclipses en Babilonia desde el] 750 a.C. al 1 a.C. (Milano: Mimesis, 2004). 

 

Jonsson, C. O., The Gentile Times Reconsidered, 4th ed. [“Los Tiempos de los Gentiles Reconsiderados, 4ª ed.”] (Atlanta: Commentary Press, 2004).

 

Jursa 1997 – Jursa, Michael, “Neu- und spätbabylonische Texte aus den Sammlungen der Birmingham Museums und Art Gallery,” Iraq, Vol. LIX (1997), p. 97-174. Tablet No. 47.

 

Kudlek, M., and E. H. Mickler, Solar and Lunar Eclipses of the Ancient Near East from [“Los Eclipses Solares y Lunares del Antiguo Cercano Oriente desde el”] 3000 a.C. al 0 con Mapas   (Kevelaer: Verlag Butzon & Bercker, 1971).

 

Labat – Labat, René, y Florence Malbran-Labat, Manuel d’épigraphie akkadienne, 6ª ed. (Paris: Librairie Orientaliste Paul Geuthner, 1988).

 

LBAT – Sachs, A. J., Late Babylonian Astronomical and Related Texts [“Antiguos Textos Babilónicos Astronómicos y Relacionados”] (Providence, Rhode Island: Brown University Press, 1955).

 

mulAPIN – Un documento cuneiforme que se comprende dos tablillas cual resumen el conocimiento astronómico antes del séptimo siglo a.C.  Unas cuarenta copias se han encontrado, la copia fechada más antigua es del 687 a.C.  La original probablemente fue compuesta casi para principios del primer milenio a.C.  Traducida y discutida por H. Hunger y D. en, MUL.APIN: An Astronomical Compendium in Cuneiform [“Un Compendio Astronómico en Cuneiforme”] (Archiv für Orientforschung, Beiheft 24; Verlag Ferdinand Berger y Söhne, Horn, Austria, 1989).

 

N/W – Neugebauer, P. V., y E. F. Weidner, en “Ein astronomischer Beobachtungstext aus dem 37. Jahre Nebukadnezars II. (-567/66),” Berichte über die Verhandlungen der Königl. Sächsischen Gesellschaft  der Wissenschaften zu Leipzig: Philologisch-Historische Klasse, Band 67:2, 1915, Págs. 29-89.

 

Parker, R. A., y W. H. Dubberstein, en Babylonian Chronology [“Cronología Babilónica”] del  626 a.C. al. 75 d.C. (Providence, Rhode Island: Brown University Press, 1956; reimprimida por  Wipf y Stock Publishers, Eugene, Oregon, 2007).

 

Parpola, Simo, Letters from Assyrian Scholars to the Kings Esarhaddon and Assurbanipal, Part II: Commentary and Appendices [“Cartas de Eruditos Asirios a los Reyes Esarhadón y Asurbanipal, Parte II: El comentario y Apéndices”] (Kevelaer - Neukirchen-Vluyn: Butzon & Bercker - Neukirchener Verlag, 1983; reimprimido por Eisenbrauns 2007). Un número de varios Volúmenes de Simo Parpola están disponibles en la red en:

http://knp.prs.heacademy.ac.uk/lettersqueriesandreports/#top.)

 

Steele, J. M. and A. Imhausen (eds.), Under One Sky. Astronomy and Mathematics in the Ancient Near East [“Bajo Un Cielo: Astronomía y Matemáticas en el Antiguo Cercano Oriente”] (Münster: Ugarit-Verlag, 2002).

 

Stephenson, F. R., y D. M. Willis, “The Earliest Datable Observation of the Aurora Borealis,” [“La base de datos más antiguas de observaciones de la Aurora Borealis”] por J. M. Steele y A. Imhausen (eds.), en Under One Sky. Astronomy and Mathematics in the Ancient Near East [“Bajo Un Cielo: Astronomía y Matemáticas en el Antiguo Cercano Oriente”] (Münster: Ugarit-Verlag, 2002), Págs. 421-428.

 

Walker, C. B. F., “Babylonian observations of Saturn during the reign of Kandalanu,” [“observaciones babilónicas de Saturno durante el reinado de Kandalanu”], en N. M. Swerdlow (ed.), Ancient Astronomy and Celestial Divinations [“Antigua Astronomía y Pronósticos Celestiales”] (Cambridge, Massachusetts, y Londres: El MIT Press, 2000), Págs. 61-76. La discusión de Christopher Walker  sobre la tablilla de Saturno también está disponible en la red en:

http://www.caeno.org/_Eponym/pdf/Walker_Saturn%20in%20Kandalanu%20reign.pdf.